La Historia de Arturito y sus dos gestores

Arturito, cuarentón y con mucha pasta heredada, no trabajada, vivía del rendimiento que le daba el dinero que manajaba su equipo gestor formado por dos personas: Segismundo (Segis para los amigos) y otro mas jovencito llamado John. Era dos formas de invertir distintas pero con ciertas similitudes; a Segis le gustaban los "blue chips" y digamos que era lentos pero seguro y su rentabilidad anual iba entre el 5 y el 8%; John era mas arriesgado y compraba chicharretes, su rentabilidad podía ser de un 20% o incluso negativa. Arturito se aburría mucho pues todos sus medio-ligues se habían casado y las noches no eran como antes, ahora todas buscaban el "compromiso" y en el CD de su coche sonaba la canción de Rafaella Carra "...para hacer bien el amor hay que pagar 10000".
Arturito seguía de cerca las operaciones de su equipo día tras día y les hacía hacer balances mensuales y últimamente semanales; John se había puesto bajista en varios valores y Segis no hacía operaciones hace ya varios días, prácticamente estaba en liquidez. Al final de una semana turbulenta vió que John tenia un +23% en su cartera y Segis un -5% y lo mandó a la calle, lo despidió. A la siguiente semana John tuvo un -13% y a la siguiente un -9%, entonces Arturito le dijo: "¿no sería mejor que intentaras hacer operaciones menos arriesgadas para no tener tantos bandazos en la rentabilidad?" y John le respondió que para eso estaba Segis, que se complementaban muy bien, que el le había enseñado muchas cosas. Arturito, con cara de póker, lo despidió también. Arturito se dio cuenta con el tiempo que había visto sus rendimientos durante 4 meses y llevaban con el 4 años, había analizado sólo un horizonte temporal muy pequeño para juzgarlos... pero en fin, si ellos lo hacen yo también puedo, dijo Arturito, para eso leo el periódico y escucho la radio a todas horas.
A las grandes fortunas les ha pasado esto por lo menos alguna vez y en estas 2 semanas muchos Arturitos habrán echado a sus gestores.